De microplástico eres y en microplástico te convertirás

El 3 de julio se celebró el día mundial, o día internacional sin bolsas plásticas, y no vi nada en los medios que hiciera alusión al tema, (Sería bueno que los medios pusieran más atención en estas fechas y otras efemérides así cumplirían con educarnos, logrando juntos disminuir el daño que como ciudadanos “sin querer queriendo” le provocamos al planeta).  

Algunas semanas antes a la puesta en marcha de la Ley 21100:  PROHÍBE LA ENTREGA DE BOLSAS PLÁSTICAS DE COMERCIO EN TODO EL TERRITORIO NACIONAL que , a decir verdad solo algunos días, a en Chile conocida coloquialmente como “ley Chao Bolsas plásticas” que entró en vigencia el 3 de Agosto de 2018, era cuasi escandaloso por decir lo menos que ya no nos dieran bolsas plásticas en los grandes comercios, supermercados y mutitiendas, bolsas que usábamos para botar la basura, guardar cachureos o más bolsas. Notas y consejos por doquier sobre qué tipo de bolsas usar y un cuánto hay de datos en su mayoría inútiles cuya función la mayoría de las veces es solo alargar el noticiero.

La nueva, buena, ley obligo a unos a recordar la vieja forma en la cual íbamos de compras, llevando nuestras bolsas de género, algunas hechas con sacos de harina, el estampado de los antiguos quintales las delataba, y a veces hasta nuestros envases para comprar aceite, y a otros a descubrir o inventar nuevas formas de ir de compras, con bolsas de género, reutilizando viejas bolsas plásticas o simplemente comprando las bolsas que te venden en el comercio, bolsas aparentemente de plástico, pero realizadas en base a la reutilización de plásticos alargando la vida útil de este material, transformándolo todas las veces que sea posible, a fin de cuentas el plástico nos soluciona problemas en nuestro diario vivir, siempre y cuando este se encuentre en uso, tenga una función, no que este botado, rodando por las calles, tapando alcantarillas, circulando en causes de canales, ríos, llegando al océano casi íntegramente, perdiendo en ese viaje pequeñas porciones que pueden enredarse en patas de fauna, o (tristemente) formando parte del paisaje como un verdadero parásito en la vegetación.

El Génesis 3:19 dice algo como “de polvo eres y en polvo te convertirás”, y por lo que averigüé “nos debe recordar la fragilidad humana”, (no tenía idea de eso), yo siempre lo asocié al natural ciclo de todas las especies e individuos sobre el planeta el que necesita reciclar y reutilizar los minerales que componen las distintas formas de vida que este soporta para dar origen y forma a nuevos seres. Traigo a colación esta cita porque creo que así como van las cosas el mencionado Génesis tenga que reescribirse a Génesis 20:24 “de microplástico eres y en microplástico te convertirás”. Existe mucha evidencia científica que indica que plásticos, microplásticos en particular se encuentran entre otras partes de nuestro cuerpo en la sangre, uno de los tejidos más asombrosos de este. Plásticos y micro plásticos que ya forman parte de nuestra estructura y a este seguro llegaron mediante los alimentos que consumimos, siniestra muestra que estos ya son componentes de una parte importante de la cadena trófica del planeta y de esto no solo las bolsas plásticas son responsables, botellas, platos, cubiertos, y otros tantos elementos y utensilios de plástico son cómplices y si eso no nos preocupara como humanidad, estamos fritos aunque el calentamiento global ya se está encargando de eso.